Central Eléctrica de Tanes (Rioseco)

La Central Eléctrica de Tanes, propiedad de la empresa Hidroeléctrica del Cantábrico y situada en Rioseco, fue construida en 1980 por el arquitecto, pintor y escultor asturiano Joaquín Vaquero Palacios, que a su vez contó con la colaboración de su hijo Joaquín Vaquero Turcios.

Su principal objetivo fue el integrar la escultura, la arquitectura y la pintura en una obra industrial, humanizando de esta manera un espacio que está al servicio de la técnica. La Central está excavada en la roca.

Se actuó fundamentalmente sobre la sala de turbinas, en cuya bóveda aplicó grandes campos geométricos de color, en tonos muy vivos blancos y amarillos sobre un fondo gris, y se revistieron de acero pulido las pilastras de hormigón que sostienen la cubierta, dejando la roca vista en los demás tramos.

También se le dio un tratamiento artístico a las carcasas, máquinas y elementos funcionales como conducciones, tuberías y barandillas. Obteniendo como resultado un conjunto impresionante, con un tratamiento muy futurista, que fue realizado con una gran economía de medios.

Actualmente no es posible visitar la Central Eléctrica de Tanes, por ello, se recomienda la visita a la Casa del Agua, lugar en el que se explica el funcionamiento reversible de la Central y en el que se pueden contemplar diversas imágenes de su interior.